Cuarenta minutos al este de Santo Domingo, la bahía de Boca Chica alberga la mayor parte de la vida marina que prospera en la isla: corales, esponjas, pulpos, peces de arrecife, crustáceos, estrellas de mar, caballitos de mar y lenguados.
Ubicada sólo a 30 km al este de Santo Domingo, la gran bahía de Boca Chica está protegida por un arrecife de coral y cuenta con aguas cristalinas de color turquesa rodeadas de suave arena blanca. El mar es, en su mayoría, de una profundidad que apenas llega hasta tu cintura en toda la bahía, libre de corrientes fuertes o zambullidas repentinas, lo que lo convierte en el lugar perfecto para inmersiones relativamente poco profundas. Las profundidades van desde un mínimo de ocho metros hasta un máximo de 35 metros. La mayoría de las especies marinas que prosperan en la isla se encuentran en las aguas de Boca Chica, desde corales duros y blandos hasta esponjas, pulpos, peces de arrecife, crustáceos, estrellas de mar, caballitos de mar y lenguados. Dos de los puntos de buceo más populares son Coral Garden y El Letrero, ambos ofrecen buena visibilidad para los amantes de la fotografía submarina, así como arrecifes de coral saludables que albergan peces murciélago, nudibranquios, langostas, peces sapo, tiburones gato y enormes colonias de medusas, entre muchas otras especies.
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